La Guarapachanga en 2019. Ganancias y horizontes

Desde el miércoles 16 de abril y hasta el domingo 21, Pinar del Río está inmerso en el festival internacional de música La Guarapachanga. Artistas de todo el país han arribado a nuestro territorio motivados por el festejo, para brindar su arte al público, a estudiantes y a otros creadores.

Con descargas, conciertos, talleres y encuentros teóricos, esta propuesta –aún joven, por sus cuatro años de vida– ya posee reconocimiento nacional. Para su ejecución han laborado en conjunto su Comité Organizador, la Dirección Provincial de Cultura, la empresa comercializadora de la música Miguelito Cuní y el Instituto Cubano de la Música, así como el Partido y el Gobierno en Vueltabajo.

La Guarapachanga es un festejo preciso, porque redime nuestra tradición y la expone a los ojos del mundo. Es un festival no para los músicos, sino de los músicos para la gente. Tiene ofertas para todos los gustos: los refinados y los más populares. Moviliza la creación y el diálogo, y lo más importante: despierta la inercia provinciana.

GANANCIAS

La musicóloga Doris Céspedes Lobo afirma que en el evento han estado presentes diversos géneros. Si bien existió en un principio la preocupación de que La Guarapachanga pudiera encausarse solamente a la música popular, queda demostrado que admite cabida para cualquier tipo de expresión musical.

Para ella, el Festival ha ganado no solo en participación sino en organización. Asimismo, señala aspectos presentes de gran relevancia:
“El primero es el vínculo que ha tenido el evento con la enseñanza artística. La Guarapachanga les ofrece a los estudiantes un espacio para demostrar lo logrado durante su formación. Además, se acercan a las más altas figuras de su especialidad en el país, figuras de un prestigio internacional… Los estudiantes de Pinar del Río no poseen muchas oportunidades como esas, en las que pueden compartir casi de igual a igual con personalidades como Pancho Amat, Barbarito Torres…

“El segundo aspecto, tiene que ver con el impulso de una participación masiva de la población a las actividades. En las dos primeras ediciones nos cuestionábamos el hecho de que la programación del evento no daba posibilidad a eso. Ya desde la edición anterior, se materializaron estrados públicos o sitios de descarga y bailables. Este año se han previsto espacios para los niños, jóvenes y adultos, donde todos pueden participar y se incluyen proyectos de creación comunitarios.

“También el Comité Organizador previó una relación entre música y artes plásticas, porque La Guarapachanga coincide con la Bienal de La Habana en Pinar del Río.

“Desde el punto de vista de la mu-sicología el Festival ha tenido aciertos considerables. Es el espacio donde las personas que de una u otra manera tienen que ver con la investigación en el territorio y alcancen mostrar sus resultados. Por cierto, esos resultados no quedan en el nivel provincial porque los medios de prensa los han dado han conocer y además los invitados nacionales e internacionales, permiten la generalización del saber y el reconocimiento a los investigadores.

“El marco teórico genera fondos para el Centro Argeliers León, que incrementan la información sobre figuras pinareñas, cubanas o sobre cuestiones específicas como la música electrónica, que se va a abordar en esta ocasión como homenaje al pinareño Juan Blanco, quien llegó a ser el Presidente de la Sociedad Internacional de Música Electroacústica”.

Por tales motivos, la especialista alega que el suceso ha tenido muchos aciertos, aunque todavía queda por hacer. Cree que se debe seguir trabajando para diversificar los espacios y buscarle una vía exacta para convertirlo en un evento oficial.

HORIZONTES

Debido a su dimensión social, el festejo fecunda la tierra vueltabajera madre de Miguelito Cuní, José Antonio Fajardo, Niño Rivera, Pedro Junco y otros tantos. Hoy músicos del territorio han accedido desinteresadamente a brindar su arte al público en calles y escenarios, porque no hay obra mejor que la que se exhibe a todos en beneficio común.

Miriela Mijares, presidenta del Comité Organizador y fundadora del evento, vaticina el futuro al expresar: (…) “mantengo la certeza de que la vida de La Guarapachanga dependerá de aquello en lo que se convierta, para la cultura y el pueblo. De uno parte y busca al otro. A paso de conga o de alma, da igual; pero tendremos que encontramos para perdurar”.

tomado de Guerrillero en http://www.guerrillero.cu/pinar-del-rio/6464-a-guarapachanguear.html

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